E
l diputado nacional y candidato a senador por el Movimiento Popular Fueguino, Jorge Garramuño, consideró ayer que el actual titular del PAMI en Tierra del Fuego, Martín Pérez “ya es diputado nacional”, según los números que maneja su partido sobre el posible resultado de las elecciones legislativas del domingo próximo.
Garramuño sostuvo que el integrante del Frente para la Victoria tiene una ventaja considerable en las encuestas y que la segunda banca se dirimirá, como ocurrió en las PASO del 11 de agosto, entre el postulante del Mopof, Matías Loffler, y el del Movimiento Solidario Popular, Oscar Martínez.
“Por ahora nosotros tenemos una diferencia de tres puntos de Loffler sobre Martínez pero eso puede cambiar en función de los indecisos”, señaló el ex intendente de Ushuaia.
También admitió que en el estamento de senadores, el FpV (a través de la actual diputada Rosana Bertone) aventaja al MPF, pero que esta vez esperan “una elección mucho más pareja que en las PASO con esa fuerza política”.
“Igual las gallinas se cuentan cuando están peladas y adentro del horno. Hay que esperar al domingo”, se atajó de todos modos Garramuño quien además aclaró que “hay que respetar a todas las fuerzas políticas participantes en los comicios”.
Sobre este pronóstico electoral del candidato mopofista, la diputada Bertone replicó que “prefiero hablar de propuestas y no de encuestas”.
“Me parece muy pobre la posición de Garramuño haciendo análisis políticos a esta altura de la campaña. En las PASO quisieron instalar que el MPF le ganaba al FpV. Nosotros, lejos de conformarnos con la victoria, nos dedicamos a trabajar más que antes. Y eso vamos a hacer hasta el último día de campaña”, enfatizó la ex candidata a la gobernación.
Por su parte Martínez respondió que “nosotros no hacemos encuestas porque son muy caras y siempre gana el que las contrata”.
El secretario general de la UOM Río Grande expresó que “vamos a hacer todo el esfuerzo necesario para llegar a ocupar una banca, pero si no llegáramos, no nos cambia en nada la vida”, aseguró.
“Campaña chata”
Por otra parte, los referentes de las tres fuerzas políticas que competirán el domingo hicieron hincapié en el bajo nivel de la campaña electoral.
“Es una campaña donde se ha buscado la confrontación y la agresión permanente. No es la manera que desde el FpV queríamos encarar este momento. Nosotros nos dedicamos a trabajar y a llegar a los votantes de otra manera”, declaró Bertone.
Y agregó que “nos gusta conciliar y escuchar al que piensa diferente sin agresiones. No queremos entrar en una lógica que no aporta en nada a la construcción política de Tierra del Fuego”.
A su vez Garramuño dijo que “es una campaña chata, donde cada uno trató de hacer lo que corresponde pero faltó lo importante que es la presencia de candidatos debatiendo propuestas”.
En esa línea, el diputado añadió que “le hubiese gustado discutir a qué intereses va a representar cada candidato. ¿El oficialismo (por el FpV) va a defender los intereses de Tierra del Fuego o va a hacer lo que le ordenen desde arriba?”, se preguntó.
Martínez habló directamente de campaña sucia, y describió cómo sus competidores (especialmente el candidato a diputado por el colacismo, Edgardo Welsch) se dedicaron a atacarlo personalmente en torno a los temas de los llamados contratos basura en la industria y su presunta participación accionaria en la sociedad que dirige la clínica de la UOM en Río Grande.
“Sabíamos que se habían reunido los enemigos de los trabajadores y del pueblo. Son gente que siempre ha trabajado para ellos mismos. Duele, molesta, indigna escucharlos, pero estamos preparados para soportar”, indicó el candidato del MSP.
Otro punto de coincidencia entre los diferentes postulantes fue que se hizo muy difícil focalizarse en las tareas propias de un diputado o de un senador.
“La gente quiere soluciones para su vida diaria. Que la escuela no esté cerrada por un problema de agua, que haya un mejor hospital y que haya viviendas con servicios o trabajo”, analizó Bertone.
Garramuño coincidió: “La inflación, el pozo de la esquina, los turnos en los hospitales. La gente no tiene definido el rol concreto de diputados y senadores y pide por todo”, observó.
Martínez también comparte ese criterio pero sostiene que desde la Cámara de Diputados se pueden motorizar acciones concretas para muchos de esos reclamos.
“Lo principal es escuchar y no manipular las necesidades de la gente, como algunos que le dan dinero a los jóvenes para que los voten”, denunció el dirigente metalúrgico.