ste día, la escuadra comandada por Fernando de Magallanes alcanza “un anchuroso brazo de mar que se internaba en la tierra”, según lo apuntado en su diario de a bordo. Así conquistaban el ansiado paso bioceánico que abrió a los europeos las puertas del Pacífico.
Antonio Pigafetta, relator de la expedición, escribió: “descubrimos un estrecho que llamamos de las Once Mil Vírgenes porque fue el día que la Iglesia les consagra”. Aunque ese nombre correspondió al cabo que está en el lado norte del inicio del estrecho y éste tuvo como primera denominación De Todos los Santos.
Superada la Primera Angostura, la flota fue a fondear en “la hoy bien conocida bahía Felipe. Allí, desde la ‘Trinidad’, nave capitana, se destacó un bote para obtener información respecto de los habitantes cuyos fuegos se habían visto durante las noches como señas inequívocas de presencia humana. Los marineros una vez en tierra, sólo encontraron una ballena muerta y un cementerio indígena, pero no pudieron ver habitante alguno. Tendría que pasar mucho tiempo aún antes que los europeos pudieran contemplar a los hombres fueguinos” (Mateo Martinic B. La Tierra de los Fuegos).
Magallanes “tuvo constantemente a la vista las costas fueguinas y en su exploración sus naves cruzaron la boca de la actual bahía Inútil y surcaron las aguas del ancho canal que separa la isla Grande de la de Dawson (…) Esta circunstancia, el gran espejo acuático y sus prolongaciones, sería consignada como un hecho geográfico notable y como tal recogida en la primera cartografía fretana con el nombre de lago de los Estrechos”.
Este logro de los españoles abrió las puertas de la navegación del Pacífico y la posibilidad de alcanzar el deseado extremo oriente asiático. En lo inmediato facilitó el abastecimiento de especias, que posibilitaron la conservación de los alimentos y aliviaron los dilemas alimenticios de los europeos.
A mediano plazo, permitió acrecentar notablemente el intercambio comercial, dio aliento a las manufacturas, al desarrollo del artesanado e industria, y generó una gran acumulación primitiva de capital empresario.
Durante cuatro siglos, la conexión bioceánica austral fue navegada por centenares de embarcaciones que siguieron los pasos de Magallanes. El estrecho de Magallanes y el paso de Drake fueron vías navegables estratégicas que provocaron una puja permanente de las potencias europeas por su control.
