abriela Castillo, ministra de Obras y Servicios Públicos de la provincia, cuestionó enfáticamente la viabilidad de la iniciativa privada como principal impulsora de obras públicas en Tierra del Fuego, en respuesta a las declaraciones del futuro presidente Javier Milei al respecto.
En sus propias palabras, Castillo recordó que "la iniciativa público privada, hubo una en la gestión del 15 al 19, fue una puerta que estuvo abierta para llevar adelante en la Argentina". Sin embargo, hubo falta de interés de empresarios en invertir directamente en obras públicas, al menos para la provincia: "Yo no recuerdo, y estaba en la función pública, que hubieran venido amontonándose en la puerta de la Municipalidad, que era en ese momento mi lugar de trabajo, diciendo ‘yo soy empresario, tengo plata y quiero invertir en las obras que necesite Tierra del Fuego’. Esto es una utopía y no existe esta cultura de trabajo”.
Subrayó la necesidad de un proyecto concreto que sea atractivo tanto para el Estado como para el sector privado: "Para que exista la iniciativa público privada tiene que haber un proyecto que lo puede hacer el Estado, que lo puede hacer este privado que traiga la iniciativa, es decir, una idea sobre la que trabajar".
Castillo destacó las limitaciones de este enfoque, particularmente en la preferencia del financista por proyectos que ofrezcan un retorno rápido de la inversión: "No es lo mismo el financiamiento de un recupero en alguna fuente a 25 años y en otra fuente a 10. Entonces también esto deja excluido al que no puede pagar”.
Además, resaltó el papel fundamental del Estado en garantizar la sostenibilidad de los servicios públicos y cuestionó la exclusión de las pequeñas empresas locales en este modelo: "Si viene el financista, es una empresa de afuera y lo piensa solo para los grandes eslabones. Ponele que encontraron una obra que le garantiza la rentabilidad, ¿qué sucede con todas las pequeñas empresas, las empresas familiares, las unipersonales, los pequeños eslabones, las cooperativas de trabajo y las empresas medianas?"
Gabriela Castillo defendió la historia de un Estado presente en Tierra del Fuego, destacando la cercanía del Estado con la gente y su capacidad para llevar adelante proyectos que mejoran las condiciones de vida de los vecinos: “No tenemos una historia en ese modelo, pero tenemos una historia de un Estado presente en donde da respuesta a estas necesidades de los vecinos. Tierra del Fuego es un claro ejemplo de esta cercanía del Estado con la gente y de cómo se llevan adelante proyectos que involucran esta modificación en las condiciones de vida de nuestros vecinos. Ahí es donde queda un huecazo en el medio en donde solo se piensa para el modelo de grandes empresas rentables”, culminó la ministra.