e publica el libro ‘La tragedia obrera de Bajo Pisagua. Rio Baker, 1906. El origen del cementerio Isla de los Muertos, Comuna de Tortel, Patagonia Occidental’. El antropólogo social Mauricio Osorio Pefaur realizó el trabajo que permitió conocer esta tétrica historia.
En octubre de 1906, un periódico publicó el siguiente texto: “En Río Baker más de 200 trabajadores abandonados, 67 personas mueren de hambre, pedimos castigo para los culpables”. Esto es parte de la investigación del libro que relata las razones del mítico cementerio (Jorge del Carmen Ripper. radiodelmar.cl. Enero de 2016).
El suceso ocurrió en 1906, cuando cientos de trabajadores fueron abandonados por la patronal y más de 60 murieron enfermos o de hambre, “donde habían sido llevados para trabajar en una compañía explotadora que extraía madera de las selvas vírgenes patagónicas”.
Osorio Pefaur develó las diferentes versiones que circularon durante más de un siglo sobre ese lugar donde existen decenas de tumbas.
Un diario informó del rescate de “149 operarios chilotes, únicos sobrevivientes de más de 200 personas” que la Sociedad de Río Baker había contratado en Chiloé, para sus faenas. De ellos, “había 60 atacados de escorbuto y disentería a consecuencia del mal alimento con que tuvieron que nutrirse y que solo consistía en fréjoles, arroz, y agua de mala calidad. Momentos después de haberse efectuado el embarque murieron dos personas”.
Osorio Pefaur revisó la prensa de aquellos tiempos, para indagar sobre las causas de la tragedia; que habrían sido dos: una epidemia de escorbuto y otra de disentería, originadas en una deplorable alimentación y agua contaminada, respectivamente.
El libro “de la tragedia del Baker en definitiva viene a dar cuenta de estos horribles hechos que enfrentaron los obreros chilotes y sus familias y el silencio de la compañía responsable aliada a la indiferencia de las autoridades de gobierno en Puerto Montt y Santiago”.
Estos hechos ocurrieron cuando Aysén “era una tierra aislada, en proceso de ocupación por parte de empresas de importantes capitales chilenos y extranjeros. Su delimitación fronteriza con tierras argentinas, recién emergía con el siglo XX. Hubo entonces muchos ojos e intereses observando lo que sucedía en ella, personas que pertenecían a círculos poderosos vieron aquí un lugar donde multiplicar su patrimonio, en algunos casos fácilmente” (op.cit.).
Autor Bernardo Veksler
