n una inesperada iniciativa, el presidente de la Nación, Javier Milei, se apresta a viajar esta semana a la Antártida, específicamente a la base Marambio, sin que las autoridades de Tierra del Fuego hayan recibido previamente comunicación alguna por parte del gobierno nacional.
Andrés Dachary, secretario de Malvinas y Asuntos Internacionales de la provincia, expresó su sorpresa al respecto: "No hemos tenido ningún contacto hasta ahora. Solamente lo que se ha difundido en los medios sobre la llegada del presidente a la base Marambio, junto a un funcionario de Naciones Unidas, la canciller, y el ministro de Defensa", declaró Dachary, destacando la ausencia de un canal oficial de información.
La visita de Milei a la Antártida adquiere relevancia geopolítica, ya que es una región que forma parte integral de la provincia de Tierra del Fuego. Dachary señaló la importancia estratégica del continente blanco como zona libre de armas de destrucción masiva, haciendo hincapié en las contradicciones actuales en la región.
"Tenemos que entrever que parte de la lógica tiene que ver con el continente blanco y este rincón del planeta libre de armas de destrucción masivas, principalmente las de características nucleares, y situando también a América Latina con estas características que es algo que, claramente, no se cumple", expresó el funcionario provincial.
Dachary recordó eventos pasados que contradicen la presunta celebración de la región como libre de armas nucleares. "Han sido los propios británicos que reconocían en 1982 la introducción, justamente, de submarinos nucleares en lo que fue la guerra de Malvinas y, posteriormente, hace tres años atrás, con la presencia de submarinos de Estados Unidos con capacidad dual. Son los submarinos que tienen protección nuclear, con lo cual esto que, de cierta manera, se viene a celebrar estaría en contra de lo que, fácticamente, está pasando relacionado con la usurpación de nuestro territorio en Malvinas".
La falta de coordinación y aviso previo ha generado un clima de incertidumbre en el gobierno de Tierra del Fuego, mientras las autoridades buscan datos sobre los motivos de la visita presidencial y la ausencia de comunicación oficial en torno a un asunto de tanta relevancia estratégica y geopolítica.
