l cuerpo será presidido por el senador riojano de La Libertad Avanza, Juan Carlos Pagotto, y se votó que los encuentros se realizarán los días jueves, aún sin horario en específico.
En este primer encuentro se dieron fuertes cruces entre el kirchnerismo y algunos bloques dialoguistas.
La reunión se extendió entre las 12 y las 14, luego de un inicio picante motorizado por la diputada Carolina Gaillard, de Unión por la Patria (UP), que cruzó fuertemente al senador salteño Juan Carlos Romero.
Romero pretendía realizar la votación en el inicio con el objetivo de dejar la ronda de debate para el final.
Sin embargo, Gaillard no lo permitió y inició un discurso de varios minutos a los que se le fueron plegando sus compañeros de bloque y legisladores de otros espacios.
La bicameral está compuesta por ocho diputados y ocho senadores que fueron anunciados el 2 enero pasado por la vicepresidenta y titular del Senado, Victoria Villarruel.
Allí radicó uno de los reclamos que esbozó el kirchnerismo este jueves en el Salón de las Provincias.
Tanto Gaillard, como el diputado y jefe de bloque de UP en Diputados, Germán Martínez, argumentaron fuertemente contra la proporcionalidad dispuesta por Villarruel y por la dilatación de la conformación de la bicameral.
De los 16 miembros totales, UP tiene seis representantes, en tanto que tres serán de La Libertad Avanza, dos del PRO, dos de la UCR, uno de Hacemos Coalición Federal, uno de Cambio Federal (CF) y otro de Unidad Federal (UF).
Por el Senado integrarán la bicameral Juan Carlos Pagotto (LLA), Víctor Zimmermann (UCR), Luis Juez (PRO), Juan Carlos Romero (CF), Carlos "Camau" Espínola (UF), y Anabel Fernández Sagasti, Mariano Recalde y María Teresa González, de UP.
Por Diputados, serán parte el jefe de bancada libertaria, Oscar Zago, y el correntino Lisandro Almirón; Hernán Lombardi, por el PRO; el catamarqueño Francisco Monti (UCR); Nicolás Massot, de Hacemos Coalición Federal; y Gaillard, Ramiro Gutiérrez y Vanesa Siley (UP).
Similitudes con la ley Ómnibus
La Libertad Avanza, el PRO y Cambio Federal son los espacios que le darán luz verde al DNU sin reparos. Los tres bloques suman seis escaños, al igual que Unión por la Patria, que ya manifestó su posicionamiento negativo.
Por lo tanto, el radicalismo y el Hacemos Coalición Federal vuelven a cobrar un rol crucial para Milei, ya que ambos cuentan con cuatro votos, dos por cada fuerza.
Se trata de los senadores Zimmerman y Camau Espínola y los diputados Monti y Massot.
Al margen del tratamiento en la comisión, al ya haberse vencido los plazos para la conformación de la bicameral, el Senado, que es la cámara por la que el DNU ingresó, está habilitado para abordarlo directamente en el recinto.
El oficialismo intentará dilatar lo más posible ese escenario, ya que Unión por la Patria tiene 33 senadores y está a tan sólo cuatro votos de lograr la mayoría necesaria para rechazar el DNU.
Las perspectivas son buenas para la fuerza opositora.
De todos modos, para poder invalidar el decreto se requiere el rechazo de ambas cámaras (de lo contrario queda definitivamente avalado y vigente), por lo que si el Senado avanzara en esa dirección luego el oficialismo podría juntar una mayoría junto a los bloques de la oposición dialoguista para aprobarlo.