n un fallo que vuelve a fijar precedentes, la Sala Civil de la Cámara de Apelaciones de Río Grande hizo lugar al recurso de apelación presentado por un beneficiario de un crédito UVA del Banco Tierra del Fuego. La resolución establece un tope del 35% de los ingresos de los demandantes para el pago de las cuotas de estos créditos.
Además, ordena a la entidad crediticia verificar el estado de los créditos y aplicar esta metodología para evitar que las cuotas superen dicho límite.
El fallo, dictado por unanimidad por los jueces Daniel Osvaldo Satini, Francisco Cappellotti y la jueza Luciana María Gutiérrez, marca un hito en la protección de los deudores hipotecarios en la provincia más austral de Argentina.
Según la resolución, la entidad bancaria tiene un plazo de 30 días corridos para llevar a cabo la verificación de los créditos y ajustar las cuotas en caso de exceder el límite establecido. Esta medida busca garantizar la estabilidad financiera de los demandantes y evitar situaciones de sobreendeudamiento.
El fallo surge en un contexto donde los créditos UVA han generado preocupación debido a la volatilidad de las cuotas, que pueden aumentar significativamente en función de la inflación y el valor de la Unidad de Valor Adquisitivo.
Esta decisión judicial representa un avance en la protección de los derechos de los deudores hipotecarios y podría sentar un precedente para casos similares en Tierra del Fuego y va en sintonía con similares sentencias en otras jurisdicciones del país.
