omenzada la temporada invernal, con miles de turistas que visitan nuestra ciudad y concurren a las principales atracciones que el sector ofrece, esta hermosa postal en la que, en plena playa de estacionamiento de acceso a la estación del ferrocarril austral fueguino se funden la vida silvestre, el entorno natural y kilos de basura desparramada, dando un encuadre casi mágico a una imagen que seguramente quedará grabada en la retina de quienes nos visitan. En fin, en esto de pretender que el Estado haga todo, ¿no estaría siendo hora que “el sector”, además de oponerse por ejemplo a la tasa turística o a la restricción de circulación de los colectivos de gran porte, invierta unos pesos para acomoda al menos su patio delantero? ¿Y que los propietarios de los equinos de una buena vez se hagan responsables de que estos no deambulen por el ejido urbano con el peligro que ello implica?
En fin, ideas que se nos ocurren nada más…
