bicado en el inconfundible cruce de las calles Deloqui y Antártida Argentina, este peculiar "museo" destaca la sorprendente relación entre Ushuaia y la Antártida.
Estos predios privados, rebosantes de basura, ofrecen a los visitantes una experiencia cultural sin igual.
Olvídense de los imponentes glaciares; aquí, las montañas de desechos son la verdadera atracción. Es un recordatorio visual de la importancia de preservar nuestro entorno. Como un irónico símbolo de conservación, esta exhibición al aire libre convierte a Ushuaia en un destino de referencia para quienes buscan lo "inusual" en sus viajes. ¡Un verdadero testimonio del ingenio humano y su peculiar relación con la naturaleza!