e grito campeón en el sintético, algo anunciado, algo lógico, como lógico puede ser el deporte en muchas ocasiones. Es que, usualmente, ganan los mejores y Camioneros, el Camioneros de Ponce que hace rato venía sin brillar, brilló, y de qué manera en este Torneo Oficial.
Afianzado, sólido en defensa, voraz en ataque e intenso en la mitad de cancha. Con nombres rutilantes en cada una de sus filas, Camioneros ganó el certamen de principio a fin y abrochó la Copa este fin de semana por la tarde al vencer en otro duelo clave a AATEDYC.
La tarde dominical, agradable, por cierto, ponía en la cancha uno de los cruces cierre de la onceava jornada. Y ahí, el Camión y AATEDYC jugaban fichas importantes. Es que si el conjunto azul lograba sacarle un punto extendería un poco más el torneo, y más aún, si lograban derrotar al elenco de Ponce, se pondrían como virtual escolta y con chances claras de pelear hasta el final.
Pero esto claramente no ocurrió. Camioneros no lució como de costumbre en la etapa inicial, aunque siempre fue más que su rival, sin embargo tuvo que esperar hasta el complemento para encontrar los goles, cortesía del chico Bleuer y de Douglas Romero, goles que le dieron la tranquilidad y el dominio total de las acciones en una tarde que, como ha sucedido a lo largo de toda la competencia, mostró un Camioneros sin fisuras.
Sonó el pitido final y lo que se venía anunciando sucedió. Nuevo campeón en el futbol grande. Un campeón serio, que volvió a mostrarse poderoso como hace rato no ocurría, un campeón de costa a costa que pondrá la mirada ahora en el horizonte regional.
Un campeón que se alzó con el título sin caer una sola vez y que, por lo tanto, despachó a todos aquellos rivales que parecían ser de riesgo, como Lasserre, CAEF o el propio AATEDYC. A todos los derrotó con claridad, a todas las pruebas las superó, perdiendo apenas puntos en el empate ante Cocol FC, la revelación del torneo. Pero sin dejar dudas en ningún momento.
Ahora quedará la búsqueda del broche de oro, es decir, cerrar las dos fechas que quedan por disputarse manteniendo su condición de imbatible.
Pero en el mientras, el elenco de Ponce disfruta y transita una semana con la corona en la cabeza, eso no se los quitará nadie, nadie pudo y el Camión amenaza con que, de seguir con este andar, nadie podrá.